A diario, estamos expuestos a sonidos en nuestro entorno, como los del televisor, la radio, electrodomésticos y el tráfico. Estos sonidos normalmente no afectan nuestra audición, pero los ruidos altos pueden dañar nuestro oído interno, causando pérdida de audición inducida por el ruido.
La pérdida de audición inducida por el ruido puede ser inmediata o puede tomar mucho tiempo en notarse. Puede ser temporal o permanente y afectar uno o ambos oídos. Aun cuando no se note inmediatamente el daño, podría tener problemas auditivos en el futuro, como dificultad para entender a las personas cuando hablan, especialmente por teléfono o en lugares ruidosos. Aunque no sabemos exactamente cómo el ruido podría afectar a largo plazo, sí sabemos que la pérdida de audición inducida por el ruido es prevenible.
Puede ocurrir de dos formas:
- Por un sonido intenso e “impulsivo”, como el de una explosión.
- Gradualmente, por la exposición continua a sonidos fuertes, como los generados en una carpintería.
Algunas actividades recreativas que pueden causar este problema, incluyen:
- Tiro al blanco y cacería
- Paseos en motonieve
- Escuchar música con auriculares a alto volumen
- Tocar en una banda
- Asistir a conciertos con música fuerte
En el hogar, los ruidos dañinos pueden provenir de:
- Cortadoras de césped
- Sopladores de hojas
- Herramientas de carpintería
El sonido se mide en decibeles (dB). Es muy raro que los sonidos de menos de 75 dB causen pérdida de audición inducida por el ruido, incluso con exposición prolongada. Sin embargo, la exposición repetida a sonidos de 85 dB o más puede causar pérdida de audición. Cuanto más alto sea el ruido, más rápido se desarrollará la pérdida de audición inducida por el ruido.
La exposición prolongada a ruidos fuertes puede provocar una pérdida de audición gradual. Como el daño suele ser progresivo, puede que no se note de inmediato. Con el tiempo, los sonidos pueden distorsionarse o escucharse más débiles. Es posible que resulte difícil entender a otras personas o que se necesite subir el volumen del televisor. El daño auditivo combinado con el envejecimiento puede resultar en una pérdida de audición grave, requiriendo audífonos para poder oír, comunicarse y participar plenamente en las actividades diarias.
La pérdida de audición inducida por el ruido es totalmente prevenible. Aquí se explica cómo proteger su audición:
- Conozca los sonidos peligrosos: Sonidos de 85 dB o más.
- Use protección auditiva: Tapones para los oídos u otros dispositivos de protección en actividades ruidosas.
- Reduzca la exposición al ruido: Si no puede reducir el ruido, aléjese de él.
- Proteja a los niños: Los niños pequeños no pueden protegerse por sí mismos.
- Eduque a su entorno: Asegúrese de que su familia, amigos y colegas conozcan los peligros del ruido.
- Hágase pruebas auditivas: Si sospecha que puede tener pérdida de audición.
Proteger la audición es esencial para mantener una buena calidad de vida. La pérdida de audición inducida por el ruido es una condición evitable con las precauciones adecuadas. Asegúrese de estar informado y tomar las medidas necesarias para cuidar su salud auditiva.